martes, 19 de septiembre de 2017

VI.

Mr White,



El libro blanco de la educación es un boceto de las lineas generales que podría realizar el proyecto educativo estatal para obtener esa ansiada calidad en las aulas.



Este escrito, realizado por el filósofo José Antonio Marina, realiza una serie de propuestas que hemos analizado en clase y sobre las que he reflexionado realizando el formulario del profesor. Os dejo aquí mis conclusiones:
Mi opinión sobre el texto
Me agrada mucho que estos planteamientos se estén realizando a día de hoy en España, demuestra una intención al menos por ciertos sectores de un cambio de raíz indudablemente necesario en nuestro país. 

Me gustaría pensar que el momento es perfecto, pero no parece ser así ya que este libro blanco va por su segundo año de vida y nada se ha puesto en práctica aún. 

El uso de comparaciones con países donde la educación funciona es vital para establecer un punto de partida exitoso.

Aspectos en los que estoy de acuerdo
Estoy de acuerdo con la arquitectura formativa que propone Marina, con el Consejo Pedagógico de Estado, Centros Superiores de Formación de Profesorado y en última instancia los centros educativos de excelencia, y todo lo que ello supone (Docentes en Prácticas como el MIR pero de la educación, revalorizando la docencia).
Aspectos en los que estoy en desacuerdoUno de los puntos donde más disiento es en el de creación de un Cuerpo de directores. No estoy a favor de la jerarquización de base. Desde mi punto de vista sería más interesante utilizar toda la arquitectura formativa antes expuesta para dotar a los docentes de las habilidades y competencias necesarias para los roles que adquieran en el centro.

Esto no crearía ninguna separación entre la dirección y el profesorado que se puede tornar desagradable en algunos casos.
En conclusión, sería de agradecer, estoy seguro que por todos los españoles, la revisión del libro por parte de un equipo de profesionales (técnicos, docentes, etc) llegasen a un acuerdo con todos los partidos políticos, y dejen de jugar con la educación y hagan un cambio profundo que revalorice nuestro sistema formativo de una vez por todas.

Podéis ir en paz.

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