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¿Cómo tú por aquí?

Hacía mazo tiempo que no nos veíamos no?

En fin, vamos a dejar de procrastinar y vamos al lío. Hoy os traigo un tema cuanto menos curioso, la participación escolar. Probablemente haya muchos puntos de vista con respecto a este tema ya que probablemente varíe dependiendo de la persona. Personalmente, la participación escolar depende principalmente del interés por una parte del alumnado y sus familias, y por otra, del personal educativo. El problema suele ser que existe una pasividad por ambas partes que finalmente resulta en la falta de participación escolar a todos los niveles. 

Para evtar este tipo de situación, voy a proponer una serie de medidas específicas para cada grupo (alumnos, familias y personal educativo)

Primeramente, creo que los alumnos son los menos proclives a descuidar la participación escolar, pero en cualquier caso pienso que sería buena idea la inclusión de estos en actividades extraescolares que no sólo les beneficien personalmente sino que también tengan algún tipo de impacto positivo para el centro. Un ejemplo de esto sería la carrera benéfica que se celebraba todos los años en mi instituto y que no sólo fomentaba el deporte sino que ayudaba a mejorar ligeramente las infraestructuras del centro.

Seguimos con un colectivo que cada vez está más alejado de la participación escolar, o mejor dicho, participan cuando les conviene. Como propuesta para las familias de los alumnos, había pensado en convivencias en horario no lectivo con los padres de los alumnos, esto no sólo mejoraría la comunicación entre ambos sino que estrecharía los lazos entre los tres grupos diferentes que mencioné con anterioridad.

Finalmente, el personal educativo podría proponer actividades de dinamización en horario no lectivo, como por ejemplo una gymcana de matemáticas. Soy consciente que estas no estarían remuneradas, pero si te has metido en la docencia por el dinero la has cagao. 

Podéis ir en paz.